viernes, 6 de abril de 2012

Antonio Graell. Primera Parte. Serie Crucifixión

"Hace más de treinta años que realicé mi primera fotografía, desde entonces he tocado casi todos los campos. De todos ellos me quedo con el retrato, en especial con la fotografía erótica, fetichista y de glamour, terreno donde he desarrollado mi trabajo más personal y el cual he mostrado en certámenes como PHotoEspaña, FICEB ó la Semana de Cine Fantástico de San Sebastián."









martes, 3 de abril de 2012

Portada y editorial Abril 2012. "Almas muertas"

Diseño de portada: LUCIANOH


Hace unos días recibimos un mail en el que nos ofrecían la adquisición, mediante intercambio económico, de una base de datos. 
Dicha base, según la oferta, tenía exhaustivamente analizado el target de nuestro producto.
El resultado de la empresa que nos contactó arrojó que nuestro target eran hombres de entre 25 y 50 años, nivel socio económico medio, medio alto, con un interés en la fotografía, literatura, diseño y la cultura alternativa en general. 
Mas allá de entender que la definición de un target siempre deja afuera mucho público, en nuestro caso mujeres (por suerte sabemos nos visitan muchas, además de tener varias colaboradoras habituales) y muchos otros que rebalsan la edad promedio del estudio, la oferta nos pareció interesante, sólo  que de ahí a comprar una base de datos lo presumimos un paso hacia lo impersonal, hacia la falta de conocimiento real de a quién nos dirigimos. Desde luego, actualmente no podemos conmensurar a quién estamos llegando con tanta exactitud, pero confiamos en que los que se suman lo hagan por otros visitantes que nos recomiendan vía mail, link, boca a boca, comentario, o lo que sea.
A propósito de este cúmulo de personas escogidas con tanto análisis y carente de alma, no pude dejar de asociarlo  con aquella novela excepcional de Nicolai Gogol “Almas muertas”[1].  
Con esto no pretendemos desmerecer ninguna base de datos, sólo pretendemos reafirmarnos en nuestro propio interés, que no es otro que hacer de Fatale un proyecto deseado, recomendado y multiplicado por el deseo de compartir


En cuanto al nuevo número que estamos por estrenar, se suma el trabajo de un fotógrafo que quisimos incluir desde el primer día. Y al que sólo me basta recordarlo, con su figura enigmática de barba larga y vestimenta negra para volver a estremecerme como esa noche de mayo en Madrid, cuando lo ví por primera vez, en lo que sería mi primera fiesta fetish y en la que él que me recibía como su organizador. Se trata del Antonio Graell, fotógrafo madrileño y referente esencial de las fiestas fetish de comienzo del nuevo milenio, además de un gran amigo.
Jimena Carballeda nos sigue deleitando, esta vez con un relato dulce y apasionado.
Recobramos "La futbolera", ilustración de Tomás Almodóvar de su serie pinup. “Marido aunque pegue”, otro virtuoso texto de Adrián Dubinsky. 
Lelan de Lely el Abuelo trae, como siempre, una reflexión inquietante, en este caso sobre el pudor. 
Y por supuesto, la mágica y transportante  música de los Suspensivos Inflamables.
Un nuevo numero inspirado, como siempre, con el alma, inclusive con el alma de muchos que hace rato ya no están físicamente entre nosotros, pero que de ninguna manera consideramos muertos. 


                                                          Andrés Casabona   




[1] En este clásico de la literatura rusa su protagonista, Chíchikov, tiene la macabra misión de adquirir "almas muertas" sólo para inflar su posición social en la Rusia Imperial de mediados del siglo XIX, cuando aún existía la mano de obra esclava y las propiedades se vendían junto a éste excedente de mano de obra sometida, es decir, los terratenientes tenían derecho a vender sus propiedades sumando a su coste dicha mano de obra. Por ende, cuanto mas “almas” poseía el dueño, mayor su oferta. Al ser “almas muertas” Chíchikov las compraba mas baratas, con la idea de posicionarse ante el gobierno central (que ignoraba si esa gente vivía o habían perecido) y así, dada la cantidad de siervos que llegaba a poseer, éste le diera el enorme préstamo que buscaba.


                                                                         

sábado, 31 de marzo de 2012

El "Factor Sorpresa" del mes: El arte de "Coquette Boudoir"

En la ultima editorial, titulada "Factor sorpresa" poníamos el significado del termino como metáfora al arrebato súbito que debe instalarse y romper cualquier cronograma preestablecido, más aún si llegaba de la espontaneidad que produce una creación artística.  Cuando Jimena Carballeda nos comentó su nueva sesión de fotos para "Coquette Boudoir" - y nos sugirió, con esa humildad que tienen los artistas cuando hacen algo maravilloso, que quizás podría gustarnos para Fatale-  sospechamos que estábamos una nuevo caso arrebato artístico, ante un ejemplo vivo de factor sorpresa. 

lo resta deleitarse  






 

lunes, 26 de marzo de 2012

Jimena Carballeda. Fotógrafa y mentora de "Coquette Boudoir"

Primera parte: 

"Me inicié en la fotografía desde bastante chica, tendría aproximadamente unos 19 años
Siempre me llamo la atención el poder detener el tiempo y plasmarlo en un papel. 
Y luego, con el correr de los años y el advenimiento de la fotografía digital, me di cuenta que no solo podía detenerlo sino también ¡Retocarlo!
En cuanto a estética, la época que abarca entre los años 20´s y 60´s me parecen fascinantes. Y unir la fotografía con esa estética me parece genial
Cuando coincidimos con Vero en el proyecto ¡más segura estuve!
Entonces pensé...si logramos ser amigas, socias y confidentes ¿cómo no vamos hacer las fotos mas lindas que existan?" 






martes, 20 de marzo de 2012

CFP o el triángulo de amor más bizarro. Por Charlotte Sometimes

Por fin estaban ahí los dos, los hermanos P, para mí.  C con esa mirada fija en la mía y F con la suya perdida, tanto como él.  Los huesos de la cadera de C golpearon contra los míos cuando me tomó de la cintura y me empujó hacia él; F puso sus dos manos en mis glúteos, acariciando de abajo hacia arriba y apretó las muñecas de C, pude sentirlo en mi espalda. C besaba intermitentemente mis labios mientras F recorría mi nuca con su lengua; C tomaba mi cara y F masajeaba mis tetas. Los dos estaban erectos. No pudo haber mucha previa, desde que lo habíamos planeado las fantasías de los tres se habían disparado tan violentamente que en ese instante, en el que me tenían entre sí, los dos me penetraron a la vez previo asentimiento entre ellos. Parados, como estábamos, me levantaron en andas y ahí estaba yo, entre los hermanos P, sostenida, volando de gozo. Las embestidas estaban musicalmente coordenadas. Sentía derretirme de placer, tenía el aliento de C en la cara, el de F en la espalda, con un brazo rodeaba a uno, con el otro, al otro. Primero F, luego yo y finalmente C llegamos al orgasmo. Sin respiro me arrojaron en el sillón y otra vez nueva sucesión: por donde había entrado C ahora era el espacio de F y así, comía muy suavemente mi coño inflamado; C lamía mi culo con tal esmero que lo deseaba dentro de mí. Yo no los toqué, me limité a besarlos profundamente. Me acomodé, me senté en la cara de F mientras C me penetraba por detrás. Ensordecí producto de mis propios gritos. Los orgasmos se sucedieron incontablemte. Agotados, exhaustos, de regocijo, dí por terminada la sesión. Latían todos mis órganos. Pero no había concluido. Alta -¡altísima!- fue mi sorpresa cuando F se levantó del sillón y se sentó sobre ese falo aún tieso, firme de C y comenzaron los hermanos lo suyo. Fue la única vez que interpreté haber cruzado límite alguno.